Un Sentimiento
La confusión
está clarísima


Batalla naval, desafío matemático o capricho administrativo,
en City Bell cargamos con el karma sin resolver
de la denominación de las calles.


Parece un retruécano de la historia. Como la Madre Urbe -La Plata- City Bell encierra en la nomenclatura de sus calles un misterio casi siniestro. En el caso de la capital provincial -tan cercana ella-, se habla de maldiciones, brujerías, mensajes masónicos y hasta algunos ven la cola de Belcebú metida en el diseño original de Pedro Benoit. Más pragmáticos y coherentes otros, se arriesgan a aceptarlo como un juego de ingenio matemático.

De todas las que estaban, no faltaba ninguna

Esteban Panelo, el agrimensor que diseñó el trazado de City Bell, no pretendió ponerse a la altura de Benoit a la hora de rotular las calles del futuro pueblo; sólo buscó que "estuvieran todas", por decir de algún modo. Y quienes llevamos por lo menos diez o quince años viviendo aquí, podemos dar testimonio de ello.

El trazado original de Esteban Panelo


En verdad, el plano primitivo -fechado en julio de 1913- muestra una clara diferenciación entre la considerada "planta urbana" y la de "quintas", separadas entre sí por la avenida Segunda de Circunvalación, conocida luego como Sarmiento. De allí hacia el "Camino de Automóviles de La Plata a Buenos Aires" (reemplazado actualmente por el Camino Parque Centenario o avenida Labougle) se escalonaban las calles 1 a 8, en tanto las arterias 9 a 15 iban entre las avenidas Primera y Tercera de Circunvalación (Rivadavia y Pellegrini, respectivamente). Las demás calles, hasta la 23, se desgranaban en la zona de quintas, vale decir entre las avenidas de circunvalación Segunda y Quinta -luego ésta recibió el número de 25 aunque se la conoció en el vecindario como "Quinta Avenida", limitada en sus extremos por las avenidas de Circunvalación Sexta (Güemes) y Cuarta (Alvear). Las calles 16, 18, 20 y 22 sólo existían en dos tramos de una cuadra cada uno entre las avenidas Tercera y Sexta, y Primera y Cuarta. Curiosamente, la Avenida Quinta no conservó paralelismo con el resto del trazado sino con el "Camino Pavimentado de La Plata a Avellaneda", el hoy Camino General Belgrano, que corre en diagonal. Fuera de este marco, el primitivo plano establece los límites del pueblo con la propiedad del señor Castells hacia el lado del río y con la sucesión Jorge Bell en los laterales restantes.

Panelo había previsto además siete diagonales en el trazado primitivo: A, B, C, D, E, (hoy Jorge Bell, Urquiza, 9 de Julio, 25 de Mayo y 19 de Noviembre respectivamente), además de la F y la G, que nunca se abrieron y fueron eliminadas del trazado hacia 1922: partían de las intersecciones de la calle 23 con Rivadavia y con Cantilo respectivamente e iban a unirse, plazoleta por medio, en la calle 11 a la altura de 20, aunque ésta es allí inexistente. La calle 11 actuaba como eje casi simétrico puesto que de su plaza (llamada "Plaza Principal", hoy Plaza San Martín) parten las cuatro diagonales más extensas del trazado. En forma equidistante de ésta se alinean las actuales Plaza Belgrano y Plaza Mitre, ya previstas por el agrimensor Panelo sobre la calle 3.

Tres zonas tres

El trazado definitivo (fechado en diciembre de 1913) conservó las tres zonas planteadas en el proyecto inicial. La primera de ellas, enmarcada por el Camino Centenario y las avenidas Sarmiento, Rivadavia y Pellegrini, comprendía 71 manzanas chicas con parcelas de 10 x 30 y de 10 x 50 metros; otro sector se extendía también entre el camino Centenario y Sarmiento, flanqueadas entre Güemes y Pellegrini y entre Alvear y Rivadavia, y estaba formado por 17 manzanas grandes encerraba parcelas de 20 x 50 metros de superficie; finalmente, el sector de quintas se extendía desde Sarmiento hasta la avenida Quinta y desde Alvear hasta Güemes.

La calle 14 tomó el nombre de Gobernador José Luis Cantilo con ocasión de la visita de este funcionario para la inauguración oficial del pueblo en 1925. En esa oportunidad también se bautizó como Jorge Bell a la diagonal que parte desde la antigua estancia y como Labougle al hoy Camino Parque Centenario, en honor al presidente de la Sociedad Anónima City Bell. Varias otras calles cobraron identidad también en este acto.

Así por ejemplo: Tobías Büchele correspondió a la calle 8, Tomás Bernard a 7, Juan B. Justo a calle 11, Dr. Raffi (primer médico establecido en el pueblo) a calle 17, Laste a 24, Intendente Silva a 21 y con el tiempo llegaron otros nombres más: La calle 20, por ejemplo, lleva el nombre de Paul Harris, fundador del Rotary Club Internacional.

En 1980 se impuso el nombre de José Manuel Estrada a la calle 5, Roberto Temis Speroni (el consagrado escritor local) a la calle 10 y José Hernández a la calle 12. Sendas placas de bronce dan cuenta de ello, aunque del último caso sobrevive un testigo mudo y vergonzoso: en la Plaza San Martín, a la altura de la diagonal 25 de Mayo, puede verse el pedestal mocho que sostuvo el busto del autor del Martín Fierro. Cada tanto, alguien da una mano de cal a la parte de donde fueron arrancados los trozos de granito que lo cubrían. Muy posiblemente muchos ignoren para qué se construyó ese mamotreto de ladrillos y cemento que, por lo demás, está semiderruido.

Ya mucho más cerca en el tiempo, un tramo de la 21 pasó a llamarse Padre Dardi, y similarmente se impuso el nombre de Sor María Ludovica a un trayecto de Rivadavia. En la intersección de ambas se erige la parroquia Sagrado Corazón de Jesús, punto de la historia en el que confluyen ambas personalidades.

No todo comienza por el comienzo

Hasta allí, desenvolverse en City Bell podía ser un dilema para el forastero pero para el habitante local, mal que mal, la cosa estaba superada. Hablar de Cantilo y Belgrano, o Cantilo y Centenario era un buen punto de referencia para el foráneo. Cualquiera de los dos puntos era una entrada directa a la comarca, o el lugar ideal para bajarse del micro.

Convengamos que resulta algo extraño eso de tener la calle 1 en la mitad del pueblo, y que entre ésta y la 17 haya sólo 400 metros, o dos bocacalles, como ocurre sobre Cantilo. Y que no facilita las cosas tener dos o tres calles con el mismo número. Pero hay quienes arguyen que allí radica la idiosincrasia local, y tal vez tengan razón. En todo caso, abonamos la posición de que la nomenclatura de las calles de una población hace a su propia identidad y que nada ni nadie puede arrogarse el derecho de borrar de un plumazo noventa años de historia, con sus usos y costumbres.

El actual sistema de numeración de las calles de City Bell obedece a la decisión del ejecutivo comunal de unificar el ordenamiento de las mismas en todo el partido, sin que se repitan los guarismos en uno y otro lado. Plausible idea para un municipio que nació y creció como una unidad urbana y no como La Plata, constituido por varias poblaciones con una historia independiente, diferente, individual. Para hacerla completa, sin embargo, habría que haber proyectado hasta los límites del partido la numeración de los frentes cuadra por cuadra. Pero gracias a Dios, hasta ahí no les llegó el dislate a los señores ediles.

Paradas y almacenes

Algunos de los memoriosos vecinos que hicieron su aporte para este trabajo recuerdan que hasta fines de la década del '50 muy pocas casas había más allá del arroyo Rodríguez, aún cuando el límite con Gonnet era, en un primer momento, la calle Sarmiento (parada "La Perla") y luego la calle Lacroze. La sucesión sin interrupción de construcciones que encadena una localidad con la otra no se consolidó antes de los últimos veinticinco años, y hasta no hace mucho tiempo prevalecía el uso de los antiguos nombres de las calles como, a modo de simple ejemplo, Monteagudo, El Ceibo, Patagonia, Nirvana, Papini, Mitre, Bélgica, Santa Clara, Viale, Rocha, Luján, Alvear, La Pastora, Tacuarí, mirando hacia uno y otro lado.

No es extraño escuchar aún hoy personas que se refieren al kilometraje para identificar a una esquina sobre el camino Belgrano. Verbigracia, el km. 9,800 correspondía a la esquina de Cantilo. Del mismo modo, la esquina de 11 se conocía como "parada El Argentino", por la referencia del almacén de la familia Pagani que por años funcionó allí. O las paradas "La Chiquita", "Ramserita", "Las Mellizas", "El Molino"...

Tocado y hundido

Pero muy otra es la realidad de hoy. El propio Gaspar Gamboa Saraví, administrador comunal bajo cuya administración se puso en vigencia la nueva nomenclatura, calificó de "a veces ridícula" la situación planteada, y se mostró despreocupado por el tema: "Yo no la voy a aprender jamás. Por eso le recomiendo a la gente que ponga las dos direcciones en su correspondencia", dijo ante el grabador de este periodista.

Lo que no está claro, es por qué la calle 11 pasó a ser 467, y su consecutiva, antes 12, es ahora 471 cuando sólo las separan 100 metros. ¿No será que el crecimiento urbano no hace propicio el sistema de numeración elegido?

Colmo.
Direcciones difíciles de entender

Para que los números "cierren", se recurrió al viejo truco de los bises en la modalidad alfanumérica de, por ejemplo, 13-a, 13-b, y así hasta llegar, verbigracia, a la increíble intersección de 13-c esquina 461-f que hace presumir que hay, por lo menos, cuatro calles 13 (13, 13-a, 13-b y 13-c) y siete calles 461 (461, 461-a, 461-b, 461-c, 461-d, 461-e y 461-f). Cualquier chanza acerca del juego de la batalla naval, está permitida.

Hablando de navales y navegación, aún queda una solución al dilema: las coordenadas geográficas. El navegador satelital de Producciones Cartográficas, editora local de cartografía que regentea Stella Marega, arroja los siguientes resultados, medidos especialmente para este libro:

144 y 11: 34º 54´ 15´´ Sur ---- 58º 04´ 14´´ Oeste
Cantilo y Camino Belgrano: 34º 52´ 54´´ Sur --- 58º 03´ 12´´ Oeste
Güemes y Camino Belgrano: 34º 52´ 57´´ Sur --- 58º 02´ 55´´ Oeste
Camino Centenario y Güemes: 34º 52´ 05´´ Sur --- 58º 02´ 18´´ Oeste
Balcarce y Camino Centenario: 34º 51´ 46´´ Sur --- 58º 03´ 13´´ Oeste
11 y Camino Belgrano: 34º 52´ 48´´ Sur --- 58º 03´ 25 ´´ Oeste
15 y CaminoBelgrano: 34º 52´ 45´´ Sur --- 58º 03´ 17´´ Oeste
Güemes y 3: 34º 52´ 23´´ Sur --- 58º 02´ 32´´ Oeste
Cantilo y Centenario: 34º 51´ 59´´ Sur --- 58º 02´ 32´´ Oeste

No será un método práctico para el caminante ni al alcance de todos. Pero con un poco de práctica puede aprenderse y resulta más exacto que el sistema en vigencia. No diga que no.

Consumatum est

Ante el hecho consumado creemos que se hace muy difícil revertir la situación, a no ser que un grupo de concejales levante la mano para votar nuevamente una reforma al respecto. Claro que convendría que antes se tomaran la molestia de recorrer la zona, escuchar a los vecinos, y aportar un poco de coherencia para solucionar un problema tan elemental como saber dónde vive uno. Elemental y vital: si en vez de una pizza de muzzarela, lo que no llega a destino y a tiempo es una ambulancia, realmente no sabemos a quién habría que pedirle explicaciones.

Devuélvale la Comuna a cada una de sus delegaciones la facultad de autodenominar sus arterias. Para diferenciar una de otra en caso de reiteración, bastará con mencionar el barrio a la que pertenece. Es una manera de rescatar y respetar la identidad local que no pocos reconocen en City Bell.