En 1922 quedó constituida la Comisión de Fomento (luego Asociación de Fomento) que fuera eje del desarrollo de la localidad. A la par de la sociedad comercializadora de las tierras reunió en su seno a los más emprendedores vecinos del nuevo centro urbano y dejó sembrada en esta tierra la semilla del desarrollo local.

La foto de ocasión muestra a los siguientes socios fundadores de la Comisión: Tobías Büchele, Urdaniz, V. Quintana, Adolfo Labougle, Emilio Fernández, S. M. Linares, José Ruso, F. Flores, Lisandro Lima, Pedro Mariscotti, O. Malter, N. Marinone, Joaquín Fernández, Juan Zambano, Trinidad Fernández, Trinidad Fernández (hijo), Arístedes Pappani, Adolfo Hochegger, Natalio Traverso, José Savoia, Fortunato Peñalva, Emilio Platero J. Tapia, Javier Castell, José Cruz; Pablo Locastro, Teodoro Licursi y Luis Gamerro, aparecen además en el grabado, hijos de Peñalva, Forp, Linares y la niñita Emilia Malter. Todos estuvieron presentes el día 2 de julio de 1922, en el local de la Escuela número 12.

"Ocupó la presidencia provisoria -dice el acta firmada aquel día- el doctor Adolfo Labougle (hijo), quien en breves palabras explicó el objeto de la reunión, que era ponerse de acuerdo para designar una Comisión de Fomento. Después de un cambio de ideas -sigue diciendo- se resuelve designar una comisión, encomendándose al doctor Adolfo Labougle (hijo) y los señores Emilio Platero, Trinidad Fernández, Lisandro Lima y Lorenzo Fortunato Peñalva para que después de un cuarto intermedio propongan el nombre de las personas que deben constituirla, como asimismo el número y nombre de las que integrarán la comisión ejecutiva y la de propaganda". Dichas comisiones quedaron así formadas: Junta Ejecutiva: presidente, don Emilió Fernández; vice, Eduardo Bell; vice segundo, Segundo Linares; secretario-tesorero, Tobías Büchele; vocales: Lisandro J. Segura, Victorino Lavarello, Juan Zambano, Osvaldo Walter, Gervasio Fernández Madero y Trinidad Fernández (hijo). La Junta de Propaganda la integraban igualmente conocidos apellidos del pueblo, de la ciudad de La Plata, y de Capital Federal. Su presidente Don Tobías Büchele, el dinámico vecino que todos conocemos, y sus vice presidentes, don Osvaldo Walter y Javier Castel. Su secretarío era don Francisco Fregossi y se completaba la lista con los siguientes vocales: José Repetto, Lorenzo Fortunato Peñalva, Emilio Platero, Lisandro Lima, Teodoro Licursi, Rolando Deluchi, Silvano Lima, Trinidad Fernández (padre), José Savoia, Adolfo Hochegger y Arístides Pappani. En esa misma sesión, y por renuncia de don Osvaldo Malter, y teniéndose en cuenta, como dice el acta "que el fundador de City Bell fue el Dr. Adolfo Labougle (hijo) se le designa presidente honorario de ambas juntas poniéndose la concurrencia de pie en su honor".

Así terminó aquella sesión inaugural de la entonces Comisión de Fomento quedando creada la entidad que, sorpresivamente, reconoce mayor mérito en el origen del pueblo al doctor Labougle que a Eduardo Bell, hijo del mismísimo Jorge Bell.

En una entusiasta asamblea celebrada en octubre de 1924 se trató lo relativo a la denominación de las principales calles de la localidad y de sus tres plazas. Se resolvió lo siguiente: denominar "General José de San Martín" a la plaza principal. A la que cruza la calle 14 se la denomina "General Manuel Belgrano", y a la que cruza la avenida Primera de Circunvalación, plaza "Teniente General Bartolomé Mitre". Se procede luego a la nomenclatura de las calles, quedando éstas designadas históricamente se las ha conocido en City Bell.

En 1926 se construyó un refugio en la plataforma de la estación, cuyo edificio actual fue inaugurado en 1927. En esos años se estima que fue tomada la tan difundida fotografía de la entrada de City Bell en Centenario y Cantilo, donde pueden apreciarse las primeras construcciones realizadas. Su realizador fue Tobías Büchele, aficionado fotógrafo devenido en reportero gráfico de aquellos años iniciales.

En 1930, una reunión extraordinaria procede a designar nuevas autoridades: presidente, Tomás Diego Bernard; vocales: señores Pattoni, Savoia, Chescotta, Fernández, Ringuelet y Bayá Casal.

A medida que pasan los años, nuevas mejoras embellecen al pueblo de City Bell. En todo se nota la acción, de los esforzados vecinos que luchan por su progreso. Se abovedan caminos, se hacen nuevas plantaciones y se solicita la construcción de desagües. En 1937 renuncia por razones de salud, el señor Tobías Büchele, el antiguo y laborioso vecino que desde la fundación de la Comisión de Fomento, no se separó un instante de su directiva, poniendo todo su empeño en servir los intereses del pueblo.
En el mismo año se modifican los estatutos. La entidad se llama, desde entonces, Asociación de Fomento.